La piedra

Cuento La Piedra - Joaquín González Cieza

Cuento La Piedra - Joaquín González Cieza

LA PIEDRA

Un 25 de mayo del 2018…

– Jim. ¡Jim! ¿Dónde estabas?
– Estaba paseando en la playa
– ¡Te puedes perder! ¡Es inmensa!
– Pero … ¡Mamá encontré una piedra rara que brilla mucho!
– ¡Ay Jimmy! ¡Tú y tus fantasías!

Un año después

– ¡Señor Presidente!, le informamos que los científicos descubrieron que en trescientos sesenta y cinco días, (suspiro) ¿Cómo se lo puedo decir?
– ¡Renato, nos conocemos desde hace muchos años, dilo directo y punto!
– Señor presidente, en ese tiempo no habrá más futuro para la Tierra, el mundo colapsará.
– ¿Qué? ¿Cómo? ¡No puede ser posible!
– Los científicos dijeron que hay un objeto en esta Tierra que nos puede salvar.  Una civilización antigua llegó a pensar que tendríamos tantos problemas en el medio ambiente que nos dejaron un pequeño consejo en un objeto llamado “Acigam Ardeip”…
– ¡Llama a todas las personas voluntarias que quieran ayudar a encontrar ese objeto! ¡Ya!
– ¡Sí! ¡Señor!
– ¡Y por cierto! Si no encuentras más de cien personas estás despedido! ¡Llama a nueve compañeros tuyos y diles lo mismo! ¡A trabajar!
– ¡Sí señor! ¡Así lo haré!

En la ciudad, la noticia corrió en todo medio de comunicación y muy pocas personas quisieron ser voluntarias.

– ¿Señor quisiera ser voluntario para salvar el mundo?
– No, señor. Es muy peligroso para mi familia todo lo que está sucediendo ahora en las calles.

Más tarde, aunque no se los preguntaron, se fueron reuniendo de a pocos, algunos voluntarios, calle por calle, y desde ser muy pocas personas, lograron formar un gran grupo de más de mil personas. Lo que parecía imposible, al inicio, se logró por el aporte del equipo del Jefe Militar Renato y de unos de sus compañeros.

Al día siguiente…

– ¡Renato! ¡Estoy muy orgulloso de su trabajo, logramos y sobre pasamos la cifra! – ¡El mundo tiene ahora una esperanza con todos los voluntarios a tu cargo!
– Señor, el mundo está en crisis económica, social y alimenticia, existe descontrol en las calles, la policía y los militares están en problemas.
– ¡Lo sé! El mundo está como está porque ahora es inevitable esta situación.
– ¿A qué se refiere señor?
– ¡Al cuidado de nuestro planeta! ¡Al interés por el agua! ¡El no contaminar! ¡La reducción del uso del plástico! ¡Las baterías! ¡El mayor cuidado de los animales!  – ¡La protección de los ecosistemas! ¡No destruirlos! ¿No te parece que mejor hubiera sido tomar conciencia antes? ¡Esto es irreversible! (se acerca a la ventana) ¡Espero que lo logremos y tengamos otra oportunidad para actuar y reflexionar!
– ¡Si señor! ¡Pierda usted cuidado! ¡Eso queremos todos!

Buscando en el mundo, los grupos de voluntarios ya están buscando por todos lados el “Acigam Ardeip”. El gobierno destinó todos los recursos para enviarlos a la mayor cantidad de rincones del mundo.

Mientras, en la casa de un millonario malo…

– ¡Etnega! ¡Muéstrame las noticias más importantes de hoy!
– Don Vicente, de todo lo malo que hay, leo algo bueno. El gobierno consiguió enviar voluntarios a todos los rincones de la Tierra, este planeta muerto parece que tiene salvación. Hay un objeto extraño que…
– ¡Yo lo quiero aquí! ¡Haz otro equipo! ¡Diles que van a tener un sueldo millonario! – ¡Que salgan hoy mismo y utilicen toda nuestra tecnología!
– ¡Claro Jefe! ¡Me parece un buen plan!
– ¡Encárgate de no fallar por que si no serás destruido!
– ¡Claro Jefe! ¡Yo… yo… yo… haré todo lo necesario por favor no me destruya!
– Mmmm… ¿Y qué haces aquí hasta ahora? ¡Sal de una vez!
– ¡Claro Jefe! ¡Ya me fui!

El engaño estaría por ocurrir…

– ¿Hola niño, por casualidad has visto una especie de objeto extraño en esta playa?
– ¿Tú eres de los señores del gobierno que lo está buscando?
– ¡Por supuesto! ¡Yo soy uno de ellos!
– ¿Cómo te llamas?
– Me llamo Etnega y soy de la fuerza de los voluntarios que buscan una salida para el mundo…
– He escuchado rumores de que hay personas que están buscando el objeto por su cuenta para darle un mal uso.
– ¿Ah sí? ¡Qué malos! ¡Felizmente yo soy de los buenos! ¿Tu sabes dónde está?
– En mi casa. Se la regalé a mi Mamá. De noche ilumina la sala y todo se ve muy bonito y brilloso.

Por supuesto la madre y su hijo, no sospecharon de la buena actuación de Etnega quien se hizo del objeto, mientras el papá de este niño, regresaba a casa después de estar tres años en la guerra.

– ¡Papá! ¡Estás vivo! ¡Te extrañé mucho! ¡Te amo papá!
– ¡Cariño, pensé que jamás volverías!
– Un gran abrazo los envolvió a los tres, y en eso…
– ¿Quién era ese señor que vi salir de casa cuando yo llegaba? Me parece conocido.
– ¡Hemos hecho algo bueno para el mundo, le dimos el objeto que Jimmy encontró en la playa!
– ¡Sigo pensando que conozco a ese hombre!
– Bueno olvídate cariño, vamos a pensar en cosas buenas y no en emboscadas ni guerras…
– ¡Sí papá! ¡Hagamos eso!
– ¡Ya lo recordé! ¡Ese tipo nos hizo una emboscada en un camino oscuro en la Selva! ¡De algún lado lo conocía!
– ¿Papá entonces lo más probable es que haya sido de los malos?
– ¡Oh no! ¡Le dimos el objeto que salvará el mundo a alguien terrible!
– ¡No te preocupes yo sé dónde encontrarlo!

Entonces se dirigieron los tres al cuartel militar del gobierno…

– ¡Quiero hablar con el Jefe de la misión tengo información importante!
– ¡Capitán Naúj! ¡Pensé que lo habíamos perdido en las batallas!
– ¡Pues aquí estoy dispuesto a luchar por el mundo! Y tengo que contarle que se dónde esta el objeto mágico que todos buscan…
– ¿Mágico?…
– La piedra mágica

El equipo de voluntarios y los militares, organizaron entonces un ataque, junto al Capitán Naúj y al Jefe Militar Renato, y acorralaron el edificio del Millonario malo que pretendía dominar el mundo al tener el objeto, y lograron recuperarlo.

En los laboratorios del gobierno, de vuelta, llegaron con la piedra mágica, y se encontraron con Jimmy y su mamá, quienes suben todos los pisos del edificio hasta que los científicos les reciben. La piedra es entregada al presidente quien la coloca en la máquina salvadora del mundo, sin embargo, al iniciar el proceso, nada funciona.

Cuando todos están empezando a ponerse muy tristes, el niño revela algo:

– Yo se que si abrimos esta piedra, se esparcirá una onda de energía de muchos colores que limpiará el planeta y nos dará la oportunidad de un nuevo comienzo.
– ¿Y tu porqué sabes todo eso?
– Presidente, cuando encontré la piedra, un ser ancestral me lo contó, pero no le tomé importancia hasta hoy.
– ¡Renato hagámoslo!

Después de unos años, en la actualidad…

– ¿Jimmy y si cambiamos todos los focos de la casa por bombillas led ahorradoras?
– ¡Buena idea papá! ¡Así ayudamos a proteger nuestro mundo!

Así, todo el mundo logró respetar el medio ambiente…

 

  • Escrito por: Joaquín González Cieza. 9 años.
  • Categoría: Niños (7 a 10)
  • Seudónimo: Luna

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